El trabajo de los mini-jobs tan extendido en Alemania, lo quieren imponer en España, entre los cientos que tenemos basura uno más. Otros dicen, es para salir del paso o los comienzos de la vida laboral, hasta que se encuentre el trabajo a jornada completa.
Es basura y complaciente dar los cuatrocientos euros a cambio de nada. Para contratar a gente subvencionada el empresario debería pagar el resto del salario mínimo interprofesional por media jornada... El trabajador que después de dos ofertas de trabajo no acepte una, debe quedarse sin la prestación estatal.
La mayoría de las personas nos adaptamos a un sueldo fijo, no importa la cantidad, da igual cuatrocientos de cuatro mil, nuestro nivel de vida lo acomodamos a la nomina, y el fin de mes iguala el bolsillo vacío.
Con las subvenciones el político hace pesebre, consigue las gracias y los votos. La situación tiende al infinito como en Andalucía. Uno pone el cazo y el otro se lleva los votos.
Proverbio chino: “Si me das un pez comeré un día, si me enseñar a pescar comeré todos” Mientras haya dinero, ni políticos ni sindicatos aplicaran este proverbio. Y con poner la mano será suficiente.
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