INSPECCIONES
Mr. Spock |
Las inspecciones dan un cierto morbo y vidilla. Cuando uno se acostumbra a recibir inspectores adquiere unos reflejos que le ayudan en la vida cotidiana. Pensando si he superado este reto, ¡Que no superare mañana!
El dueño de un restaurante recibe a los inspectores de sanidad en plan torero, esperando dar el pase de pecho del día. Me cuenta como el inspector ve la lejía para uso alimentario que está en la misma caja del año pasado… el cloro mas pasado ya no puede estar, la fuerza desinfectante se ha ido por el aire. El inspector firma que todo está correcto.
Ayer recibió la inspección del sanitario. Tiene el restaurante a la orilla del mar y en obras, preparándose para el verano y las cámaras frigoríficas las tiene… de esa manera. No podía consentir que el inspector las viera, pues le cerraría el local, se han pasado las comuniones y no se deben perder fines de semana. Sabiendo que el inspector se conforma con escribir una sanción, saca una tortilla de patatas y la pone encima de la barra, el inspector se pone como loco escribiendo y diciendo como se debe conservar la tortilla. Una vez que el escribano termino se fue con el deber cumplido y el dueño del local respiro aliviado.
Me dijo, - Las multas por tortillas, las bandeo como quiero, es mas pensando escape del congelador.
LA CARGA
Cada cual a lo largo de la vida debe llevar su carga; ya sea familiar, de trabajo o de ocio… unas vendrán impuestas y otras voluntarias, ambas deben ser asumidas con la misma actitud.
Querer librarse de ellas es una irresponsabilidad, una niñería, y egoísmo pedir ayuda para compartirlas. Cada cual su carga, su vida y sus decisiones. No debemos opinar de la carga de otro, al igual que un tercero no debe comentarnos lo que pesa la suya…
Toda ayuda será bienvenida, si tengo sed, agradezco un poco de agua, si tropiezo y caigo cogeré la mano que me ayude, pero mi carga la debo transportar yo. Ni más peso ni yugos para tirar del carro. La carga es mía, si hoy es mochila, estupendo; si mañana la arrastro, mala suerte. No busco en el horizonte nadie quien me la lleve, tan solo que me acompañe.
EL MOMENTO
El momento es lo único que importa, vivir el presente y mejorar el futuro gracias al pasado. La felicidad esta en el instante de la luz, en nuestras manos y hacer eterno ese momento, se consigue mirando las posibilidades de tu mano.
Los sueños como las pesadillas no caben en tu mano, todo lo que no logre alcanzar la mano, se escapa entre los dedos y se lleva los momentos de felicidad.
Debemos hacer de cada momento la máxima expresión de felicidad y vivirlo como único, y no esperar nada de la durabilidad ni la confianza, todo momento el magnífico si lo vivimos como tal…
Todo momento tiene su destello, el no verlo es culpa nuestra por tener los ojos cerrados. El destello que nos hace felices lo tapamos con sabanas y cortinas de bellos colores, vemos algo de luz pero no el esplendor… la velocidad de la luz frente al muro de lo imposible, no vemos la chispa pero si vivimos las lamentaciones.
El momento está en nuestra mano y pobre si no lo sabemos ver.
DERECHOS
Pedir derechos conlleva obligaciones, son como la noche y el día, hoy toca más luz por ser San Juan, pero llegara Navidad.
Gran parte de la sociedad sabiendo lo anterior no quiere derechos… tan solo privilegios, creen que por el mero hecho de chillas se los merecen. Privilegios sin meritos, sin mejorar la sociedad donde viven. Tan solo que me lo den.
Quien de privilegios de vadraga, no le faltara gente que se le arrime… tenemos derecho a una hipoteca digna, la cual firmamos y que la pague el otro.
Quiero privilegios, los derechos para los animales… perdón, estos no tienen deberes. Por lo tanto derechos para quien los quiera, que me ponga buenas viandas por delante y el que venga detrás que la tiemple.
Lo mismo que hay un chiringuito para garantizar los derechos (justicia) Que monten otro para los privilegios… perdón está montado, el de la mujer, el de la juventud, espero que algún día aparezca el Instituto de hombre.
Ni igualdad ni derechos…PRIVILEGIOS
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