domingo, 16 de septiembre de 2012

OPINIÓN: ESPAÑA



Capitán Kirk
Más de 67.000 personas se manifestaron ayer en Madrid en contra de los recortes llevados a cabo por el gobierno del PP
Al grito de "Quieren arruinar el país, hay que impedirlo" los subvencionados sindicalistas increpaban a la masa sindicalista que se reunió ayer en la plaza de Colón con banderas republicanas, de la Unión Soviética y de los sindicatos. Y todo esto tras un letargo de ocho años.

Los sindicatos de este país no tienen vergüenza. Ayer se manifestaron, entre otros, los más de 33.000 sindicalistas liberados que el día 1 de octubre volverán a ocupar su puesto de trabajo. Y eso ha cabreado a más de uno que estaba viviendo la sopa boba.
¿Cuando entenderán los políticos que los sindicatos deben ser independientes y no subvencionados? ¿Cuando entenderán los españoles que estos sindicatos sólo representan al 15% de la población activa y no a la totalidad de trabajadores? ¿Cuando entenderán los españoles que los movimientos políticos del PSOE e IU son manipuladores y causantes en buena parte de lo que está pasando. Unos por activa y los otros por pasiva.?
Pues parece ser que sí, lo van entendiendo. Por eso ayer fue un estrepitoso fracaso la manifestación contra los recortes del gobierno del PP. Y no por que este lo esté haciendo bien, que de eso nada, monada. Sigue subvencionando a los estómagos agradecidos que ayer se manifestaron en su contra, mordiendo la mano que les da de comer.
Y es que se ha llegado a un punto de corrupción y de hastío en España que esto no se resuelve si no es con una revuelta generalizada eliminando a los políticos, a todos, de la faz de la tierra. Debemos aprender de Islandia que siendo un país jóven da clases a la primera nación de Europa, nosotros.
Cuando su primer ministro rescató con dinero público a los bancos, los islandeses lo metieron en la cárcel, al gobierno entero. Y salieron de la crisis. Hoy ha recuperado su hegemonía.
Nosotros rescatamos a Bankia con dinero público, una entidad privada, y hacemos recortes contra los ciudadanos que pagan ese rescate.
Se mantienen las autonomías, las embajadas de estas, se subvenciona el cine (sólo si eres de izquierdas) a los sindicatos y se mantienen tantas televisiones públicas como haga falta para tener colocados a los colegas, simpatiznates de partido y familiares.

Prestamos dinero a las empresas privadas como Abengoa a fondo perdido, si con el favor se nos coloca a la niña de administrativa. Gastamos lo que no tenemos en financiar los colectivos de gays y lesbianas de Argentina y aportamos la friolera de 500 millones de euros para el metro de Vietnán. Dedicamos un fondo del presupuesto para estudiar la cría de la lenteja de no sé qué país, y colocamos una cruz a los caídos en Moscú. Mantenemos las peores relaciones diplomáticas de la historia, ponemos en la calle a 5.000.000 de personas y destruímos el 52% del tejido industrial.
Asfixiamos a los autónomos con una presión fiscal insoportable y subimos las tarifas de luz, gas y combustible. Obstaculizamos los estudios de mercado para inversores extranjeros que tienen que realizar 17 protocolos disitintos. Mantuvimos en secreto los vertidos de petróleo en las costas andaluzas, impidiendo que las televisiones grabaran el suceso. Negamos por activa y por pasiva que hubiese crisis, guerra en Afganistán, y afirmamos que Céuta y Melilla eran de Marruecos. Y durante todo ese tiempo, en lo que es muy seguro que me he dejado algo en el tintero, nuestros sindicatos hivernaban en su cueva osezna de Yogui y Bubu hasta que se cambiaran las tornas. ¿Y qué hace el gobierno cuando se renueva? Condecorar a los salientes con la más alta distinción por la labor efectuada, colocar en los más altos despachos de las empresas afines a su color a los salientes que se retiraban con unos super sueldos vitalicios por los servicios prestados a la nación. Y los sindicatos seguían durmiendo el sueño de los justos.
Hasta ayer, que despertaron porque a la mitad de los que fueron (los otros fueron engañados) los ponen a trabajar el día 1 de octubre. El resto, los engañados, médicos y funcionarios pensaban que se encontrarían con una multitud semejante a la de Barcelona por una Cataluña libre, esos otros. Sin embargo se dieron cuenta que fue una manifestación estudiada para hacer el paripé televisivo y manipulada por los mismos que nos han arrastrado al agujero de donde no vamos a salir en varios años, y esto va a peor.



Hoy estamos como Grecia estaba hace un año. Lo malo es que nosotros no estamos unidos y esto se presenta muy negro. Tanto que la persona que se quede en el paro y ronde los 40 años para arriba, no encontrará trabajo en varios años.  Y no pensemos que Eurovegas va a salvar la situación, eso lo hará de una pequeñísima parte de lo que se avecina, y aún no ha comenzado. La Paramount, en Alhama, debía de empezar en Abril, ahora dicen que en Octubre, yo no he visto ni un movimiento de tierras, ni una sola excavadora y ni un triste topógrafo. Y es que el daño es mucho e irreversible, ya que se ha sobrepasado el punto de no retorno, y para levantar esto otra vez, hay que bajar mucho los impuestos, reducir al máximo las tasas de combustible, obligar a los bancos, por ley, que faciliten los créditos que niegan. Reducir el gasto público eliminando todas las autonomías, haciendo eficaz y razonable el uso y no abuso de la sistencia sanitaria, controlar el despilfarro farmacológico en beneficio de los genéricos en lugar de las marcas. Controlar la alimentación con un ministerio responsable, que garantice la no adulteración de los productos con grasas saturadas y de pésima calidad que provocan enfermedades incipientes en los niños aumentando el gasto sanitario, Control absoluto de los inmigrantes, si no cotizan, que paguen la sanidad. Mejorar la educación devolviendo al profesorado la autoridad, evitando los adoctrinamientos políticos, saneando de mentes enfermas y corruptas las escuelas, comisariados y justicia. Erradicando el monopolio político de la justicia y religión...
Pero por desgracia, no es así. Esto es España.
Capitán Kirk.

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