Recientemente ha salido a la luz un vídeo donde una niña supuestamente palestina de cinco años reprocha a unos soladados israelitas su ocupación en Gaza. El caso es que la niña va vestida con el ropaje palestino y lleva la bandera en la cabeza muy bien puesta, con dos coletas rubias que recuerdan más a una india norteamericana que a una persona musulmana. Blanca, rubia con rasgos occidentales y hablando un ingles muy nasal y con un acento del sur de los USA. La niña se dirige a los soldados, pero estos reaccionan sin gracia, como si allí no hubiera nadie. Lo normal es que a alguien se le escape una sonrisa de admiración por el coraje de la niña, sin embargo se mueven y la ignoran como si oyeran llover. Esto me recuerda a los esfuerzos y montajes de un director de cine que se inventa una historia para desviar la atención del país sobre una noticia de escándalo sexual del presidente. Se llamaba La cortina de humo.
Si se analiza el vídeo, hay un momento en el minuto 1:42 en el que la niña se dirige a los soldados pero mira hacia un ángulo en el que ellos no están. La cámara la sigue y hay gente vestida como occidentales que la fotografían, pero se nota un comportamiento extraño entre ellos, es como si las piezas hubiesen sido puestas desde escenarios diferentes. La música está demasiado elevada para evitar identificar el acento, sin embargo se nota un marcado tono norteamericano.
Esto me recuerda que es muy fácil manipular a la opinión pública y hacer creer lo que en realidad no es. Se ha utilizado rencientemente en la guerra de Siria para mostrar imágenes bélicas que no corresponden al país musulmán, ni por armamento, los carros de combate son de la guerra de Irak, ni por las situaciones geográficas. Haciendo parecer más malos al enemigo.
Este documental de gran valor educativo, nos muestra qué hay de realidad en la franja de Gaza.
Pallywood.
Capititán Kirk
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